/liferay/image/image_gallery?uuid=2c6b8c4c-eb7f-4c44-a610-5cd93e4c5e7b&groupId=10228&t=1302850906076
Consultorio Jurídico

Consultas realizadas

Buenos días, soy el papá de un niño con autismo, con un porcentaje de discapacidad reconocido del 34%. Estoy pensando en constituir un patrimonio protegido para mi hijo, pero me surgen dudas que me gustaría me ayudasen a resolver. Les contacto remitido por el CERMI, ellos me dieron su referencia ya que no podían asesorarme a este nivel de detalle. Las dudas que tengo están más bien relacionadas con cómo se debe administrar el patrimonio protegido ya que según la ley las aportaciones que haces al patrimonio durante el año fiscal, además de rebajar la base imponible del que aporta, asume que esa aportación tiene que consumirse en los 4 años siguientes, sino pierdes el derecho a la deducción y que además ese uso es para necesidades vitales ¿qué se entiende exactamente por necesidades vitales? ¿podría entenderse la adquisición de una vivienda mejor acondicionada para disfrute de mi hijo puesto que en la que vive se le hace pequeña? Creo que lo máximo que puedo aportar al patrimonio protegido por año son 10.000 € y que por tanto tendría que dedicar esos 10.000 € a atender las necesidades básicas de mi hijo los próximos 4 años. Para él es como si fuera rendimientos del trabajo, en lugar de míos ¿verdad?. Si son rendimientos del trabajo de Yago ¿no puede ahorrarse ese dinero para el futuro? ¿se tienen que gastar en esos cuatro años siguientes sí o sí?. Al ser menor de edad, y con discapacidad intelectual, tiene TEA, él no puede gestionar su patrimonio ¿cómo justificaría yo los gastos propios de su día a día, como alimentación, pañales, integración sensorial en piscinas, necesidades vitales etc.?, entiendo que hay gastos que podría guardar justificación, pero de otros es más complicado. ¿Cómo recomendáis crear este patrimonio y qué aportación entendéis que son las recomendadas para no perder otros derechos como la ley de dependencia? En realidad no sé muy bien qué opción es la que mejor se puede adaptar, y todavía no he conseguido que nadie me lo sepa explicar. En lo último que estamos pensando su madre y yo es en adquirir un piso de mayores dimensiones, tipo vivienda unifamiliar, en el que pueda disfrutar de más espacio para su desahogo y el de su familia, al tener más espacio y zonas libres no se siente tan atrapado, pero no sé si parte de las aportaciones para dicha adquisición pueden formar parte del patrimonio protegido o no, el gasto es para atender una necesidad vital entiendo. O si bien si esa futura vivienda puede formar desde ahora como aportación al patrimonio. En otro caso no sé si podría aportar la vivienda actual, aún hipotecada como patrimonio protegido, y si si es posible cómo se repartiría el valor de la misma dentro de la reducción anual que se puede aplicar en el IRPF por formar parte del plan. Como verá tengo un mar de dudas al respecto y no sé donde las puedo resolver, por eso acudo a ustedes que seguro podrán orientarme mejor o dirigirme a quien pueda. Quería constituir el patrimonio este año para poder tener derecho a la reducción en la renta de 2015, ¿qué pasos debo seguir?, voy directamente al notario para levantar escritura pública?. Mil gracias de antemano. Espero su comunicación. Un saludo David.

Déjeme ordenar un poco las cuestiones:

Sobre el plazo de 4 años, lo que dice la normativa fiscal del Patrimonio Protegido no es que haya que gastarlo en 4 años, sino que no se puede disponer de lo aportado en este plazo. La Agencia Tributaria entendió que el empleo del dinero era un acto de disposición, por lo que habría que tenerlo paralizado ese plazo.

Afortunadamente, en 2009 se incorporó un texto en la parte sustantiva de la regulación que indicaba que “no se considerarán actos de disposición el gasto de dinero y el consumo de bienes fungibles integrados en el patrimonio protegido, cuando se hagan para atender las necesidades vitales de la persona beneficiaria.” En consecuencia, se pueden hacer esos actos, pero no es obligatorio hacerlos. Se puede ahorrar.

Sobre las “necesidades vitales”. Es el término que utiliza la ley, sin explicar más. Se puede entender desde las gastos para mantener con vida a una persona hasta todo tipo de gastos que realice en su vida ordinaria, incluidos los extraordinarios. En este último sentido se está interpretando, aunque no ha faltado algún inspector de hacienda que lo consideraba muy restrictivamente.

Aportación anual: puede aportar lo que quiera, solo que podrá deducir por 10.000. Si se pasa, puede deducirlo en los cuatro años siguientes, así que podría hacer una aportación de 50.000 y deducir cada año 10.000.

Sobre su influencia en otras aportaciones públicas, es cierto que la ley fiscal lo considera como un ingreso del beneficiario, como renta del trabajo, por lo que podrían plantearse problemas. No obstante, ha habido opiniones bastante fundadas que entienden que no, yo creo que se da ese riesgo.

Lo referente a la vivienda no veo muy claro lo que se pretende, habría que ver con más detalle, Pero tenga en cuenta que hipoteca no es igual a deuda. La situación normal es comprar un piso con un préstamo, y como garantía establecer una hipoteca. A partir de aquí van por separado la deuda y la hipoteca; la primera pertenece a su titular y la segunda sigue al piso. Si dono un piso hipotecado, el que lo recibe no se convierte en deudor, sigo siéndolo yo. Solo que el dueño del piso puede llegar a perderlo. Lo que no se podría es transmitirle la deuda, el que tiene que pagar al banco es el que contrató con el, no el nuevo dueño del piso. En consecuencia, le estamos aportando un piso, pero el beneficiario no pasa a deberle nada al bando, el que lo debe sigue siendo el que lo aporta.

Volver
Comparte esta página:
  • Compartir en Google
  • Compartir en Digg
  • Compartir en Facebook
  • Compartir en Technorati
  • Compartir en Twitter
  • Compartir en LinkedIn
© 2010 Aequitas